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9 de septiembre de 2012

Mazda confirma inversión en México

Miguel Ángel Pallares Gómez

Pese a la suspensión de Brasil y Argentina del Acuerdo de Complementación Económica (ACE) 55, la automotriz Mazda confirmó que mantendrá su inversión por 500 millones de dólares para instalar una nueva planta en nuestro país, sin embargo, reveló que hizo cambios en su proyecto inicial relacionado con las exportaciones.

Leopoldo Orellana, presidente de Mazda Motor México, aseguró que la inyección de capital destinada a construir el complejo en Salamanca, Guanajuato, no tuvo ningún cambio en monto ni volumen de producción, pero resaltó que tras la decisión de Brasil se ha buscado reducir la cantidad de autos destinados a ese mercado y redireccionarlos a Estados Unidos.

“En un principio, Mazda consideró exportar entre 50 y 60 por ciento de la producción de la planta a Brasil, pero ahora sólo será el 20 por ciento. Se diversificó el plan de negocios inicial”, dijo y explicó que “la inversión sigue, lo que cambia es el destino”.

Expuso que la estrategia de la compañía será diversificar las exportaciones pensadas para el mercado brasileño, ya que no se tiene garantía del cumplimiento de los acuerdos por parte del país sudamericano después del periodo de cuotas. Añadió que pese al cierre de fronteras, México seguirá atrayendo inversiones en el sector automotriz.

Calificó de preocupantes las medidas proteccionistas de países como Brasil y Argentina, las cuales en su opinión sólo resolverán el problema de déficit comercial de forma momentánea, por lo que se mantendrá el problema a largo plazo.

Orellana resaltó la importancia del cambio en su plan de negocio porque la nueva planta deberá tener nuevas adecuaciones para cumplir con las normas estadounidenses de emisiones de contaminantes, eficiencia en combustible, requisitos legales y las exigencias de seguridad en las unidades. Y sobre las diferencias en los consumidores no hay mayor problema, comentó.

Al hablar de Argentina, precisó que en el primer plan de exportación no se contemplaba enviar automóviles a dicho país, por lo cual no hubo un impacto directo en sus objetivos.

Ventas

Este año, las ventas de Mazda en México no han tenido un buen desempeño, luego que el abasto de su camioneta CX-7 producida en Japón no ha cubierto la demanda en el mercado mexicano, lo cual ha ocasionado una caída del seis por ciento de enero a agosto en las ventas totales del corporativo en nuestro país.

Para finalizar 2012, Mazda prevé una caída del diez por ciento en sus ventas en México con la colocación de 27 mil unidades. Cabe decir que la empresa realizó un aumento en el precio de sus vehículos de cinco y seis por ciento a principios de este año y descartó hacer otro ajuste en lo que resta del año.

Leopoldo Orellana recalcó que el efecto del desabasto en sus unidades será temporal y las ventas de 2013 mostrarán crecimiento. Añadió que en octubre de este año lanzarán al mercado la CX-5 y con ello también se aminorará el impacto en sus ventas.

Para finales de 2013 la producción de la nueva planta en Salamanca también beneficiará a una reducción de los precios de sus vehículos al no tener que importar el producto, dijo el directivo y consideró que las perspectivas para la economía industria automotriz mexicana son buenas, por lo que podría crecer hasta 15 por ciento en los próximos años.

En cuanto a su posición frente a la posibilidad de implementar una nueva Norma Oficial Mexicana (NOM) para regular las emisiones y el gasto de combustible de los vehículos nuevos vendidos en México, Orellana dijo que es posible un aumento entre 600 a mil dólares en los precios al consumidor y respaldó la posición de la industria sobre la necesidad de flexibilidades.
 

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